Museo Reliquia Histórica "Monitor Huáscar"


Uno de los museos flotantes más antiguos del mundo

www.huascar.cl

Su contratación para iniciar la construcción.

El contrato de fabricación del Huáscar fué firmado en Birkenhead, Inglaterra, el 12 de Agosto de 1864, entre el Capitán de Navío José María Salcedo, en representación del gobierno del Perú  y los Astilleros Laird Brothers.
El valor del contrato es de 71.000 libras, pagaderas en 5 cuotas, sin incluir el costo de los cañones. El plazo de entrega era de 12 meses; sin embargo, el certificado de construcción no se firmaría antes del 12 de enero de 1866.


Eslora máxima
65 mts.
Eslora entre perpendiculares
63 mts.
Manga
11 mts.
Desplazamiento
1.100 toneladas
Potencia
300 HP
Calado
5 mts.
Velocidad estimada
12 nudos
Dotación
22 oficiales y 180 tripulantes


Bajo el número 321, fué construido el blindado; hasta recibir su nombre definitivo en octubre de 1865; "Huáscar", en honor a uno de los hijos del Inca Huayna Cápac  y el hermano del Inca Atahualpa, último Inca del Imperio peruano Prehispánico.   
John Laird, de los Astilleros Laird Brothers, donde fué construido el Huáscar entre Agosto de 1864 y  Enero de 1866. En estos mismos Astilleros fueron construidos para Chile en 1890 los cazatorpederos Lynch y Condell y en 1895, los destructores Orella, Serrano, Muñoz Gamero y Riquelme.  

La torre de artillería

La torre de artillería giratoria fué diseñada por el oficial inglés Cowper Phipps Coles. Está situada delante de la torre de mando, descansa y gira sobre una senda de roletes ubicada en la segunda cubierta. Tiene además un pinzote guía fijo que descansa en un tintero apernado a la quilla.
La coraza de esta torre es de espesor variable y también va apernada a una estructura metálica, con un forro interior de madera, con el fin de amortiguar los impactos.
Originalmente la ronza de la torre era manual y necesitaba el esfuerzo de 16 hombres que se demoraban unos 15 minutos para cubrir todo el campo de tiro. En realidad era más rápido y efectivo hacer girar el buque con los cañones apuntando a la dirección deseada.    

José María Salcedo Primer Comandante del Huáscar

La negociación del contrato y la supervisión de la construcción del Huáscar fueron encomendadas al Capitán de Navío José María Salcedo. Este Oficial de origen chileno tenía una basta experiencia en este oficio. Durante más de 10 años efectuó viajes a los Estados Unidos, Francia e Inglaterra  para comprar o supervisar la construcción de nuevas unidades para el gobierno del Perú.


CN. José María Salcedo Primer Comandante del Huáscar

El Comandante Salcedo negocia y firma el contrato con los Astilleros Laird Brothers el 12 de Agosto de 1864 después de haber conseguido una rebaja de 96.000 a 71.000 libras, pagaderas en cinco cuotas.        
La llegada del blindado Huáscar al Perú se produce en un momento de baja actividad para la marina de ese país, puesto que muchos de sus buques son dados de baja y desguazados. El Huáscar, si bien no es eliminado, se mantiene casi inactivo por muchos años anclado en el puerto del Callao. Sólo en mayo de 1877, a raíz de una asonada militar contra el gobierno del Presidente Prado, el BLINDADO demuestra todas sus capacidades como buque de guerra. Ese año el Huáscar es ocupado por oficiales insurrectos que seguían al caudillo Nicolás de Piérola, zarpando subrepticiamente desde el Callao. De inmediato es declarado desobediente y se autoriza su captura para ser sometido a la autoridad legalmente constituida. El 22 de mayo el buque es abordado por el propio Nicolás de Piérola, quien iza la bandera presidencial en el buque, lo que obliga al gobierno a organizar una división naval al mando del Comandante Juan Guillermo Moore, que tenía como órdenes capturar y rendir al  Huáscar.

Durante el tiempo en que estuvo sustraído, se cometieron una serie de tropelías contra buques e instalaciones de tierra, especialmente británicas, debiendo recurrirse a la protección de los intereses ingleses por parte de la división naval en el Pacífico de la Real Armada británica al mando del Almirante Horsey.  En un acto de advertencia, el Almirante inglés oficia al Comandante del Huáscar, Luís Germán Astete, conminándolo a terminar con el ataque a las propiedades británicas, ya que de no ser así deberá tomar posesión del Monitor.  En la respuesta de Astete se rechaza la intervención extranjera en las disensiones que puedan haber en el Perú, aprovechándose políticamente de esta situación para captar adeptos a su causa.  El 28 de mayo, el Huáscar bombardea el puerto de Pisagua, desembarcando algunos hombres, que toman momentáneamente la ciudad.

Después se enfrenta con la división naval a cargo del Comandante Moore, retirándose luego de intercambiar fuego. Al día siguiente se enfrenta a las fragatas Shah y Amethyst, de Gran Bretaña, donde hábilmente esquiva los torpedos disparados en su contra, logrando escapar al amparo de la noche. Comprendiendo lo insostenible de su situación, el Huáscar se dirige hacia Iquique para convencer al Comandante Moore de que se integre a su sublevación, lo que es categóricamente rechazado, debiendo Piérola y Astete entregarse y devolver el buque a la autoridad peruana. 

Huáscar con bandera chilena

Tras el Combate de Angamos, luego de algunas reparaciones en Mejillones, el Blindado Huáscar navegando por sus propios medios llega a Valparaíso, donde es recibido con los vítores de toda la ciudadanía, quien comprendía la importancia de que este buque enarbolara la bandera chilena. Luego de ser minuciosamente reparado, se incorpora a la Escuadra nacional que procede a efectuar un bloqueo desde Arica hasta Mollendo al norte del Callao. En febrero de 1880 el Huáscar es enviado a bloquear el puerto de Arica.

En Valparaíso se repararon las averías y es interesante hacer notar que algunos de los piquetes producidos por los proyectiles que rompieron la coraza fueron taponeados con trozos de bronce, lo que ha quedado a la vista sobre todo en la torre de los cañones al arenarse este a plancha desnuda durante la restauración de 1971. Las perforaciones de la torre de los cañones causada por proyectiles penetrantes y que estallaron en su interior, fueron taponeadas con acero blando con gran precisión.

Después de haber sido reparado el Blindado Huáscar al mando del Capitán de Fragata Manuel Thomson, llega al puerto de Arica, junto con la cañonera Magallanes, a relevar al Blindado Cochrane en el bloqueo impuesto a ese puerto peruano. Ese día las baterías de tierra y los cañones del Monitor Manco Cápac, disparan con un afán provocador sus fuegos sobre las naves chilenas a fin de provocar un combate donde nada tenían que perder debido a sus estratégicas posiciones. La imperturbable mesura de las naves chilenas se ve interrumpida cuando avistan un tren que llega con cientos de soldados. Viéndose la oportunidad de lograr un objetivo militar de importancia, el Huáscar se desplaza hasta quedar a tiro de las vías férreas, lo que significó quedar a su vez a tiro del fuego enemigo. Sin embargo no se le causa mayor daño, logrando, sí, el Huáscar que el tren militar se devuelva a la ciudad de Tacna. Momentos después de lograr su objetivo, el Huáscar vuelve a sus posiciones de bloqueo, siendo nuevamente provocado por el Manco Capac, que se desplaza a su encuentro. 

Decide entonces el Comandante Thomson utilizar el espolón como único medio de vencer a la fortaleza artillada que era el buque peruano; estando a casi doscientos metros de lograr su objetivo, las máquinas del Huáscar por efecto de la ebullición del agua de las calderas se ven afectadas es su fuerza, dejando al navío casi sin movimiento; siendo en este momento alcanzado por un  certero disparo del Manco Capac, que rompe el palo de mesana y a su vez hirió de muerte al Comandante Manuel Thomson.  Diecisiete días más tarde el Huáscar, al mando del Capitán Carlos Condell, junto al Blindado Blanco Encalada vengan la muerte del valeroso Manuel Thomson, bombardeando Arica, destruyendo las baterías de tierra y venciendo al Manco Capac, que no tuvo otra alternativa que abrir sus válvulas de fondo provocando el autohundimiento.

17 de Marzo de 1880

Huáscar y el Matías Cousiño pretenden capturar a la corbeta Unión del Perú, que en una intrépida maniobra logra romper el bloqueo y desembarcar pertrechos a los aliados peruano-bolivianos acantonados en Arica, logrando sólo bombardear las fortificaciones de tierra, puesto que la corbeta Unión logra escapar.

El  10 de Abril de 1880

Se inicia el esperado bloqueo al puerto del Callao, en donde participa activamente el Huáscar, causando resquemor entre los peruanos, que ven al buque que tanto alabaron ahora enarbolando la bandera chilena y hostilizando a su patria.

El 15 de Diciembre de 1880

Carlos Condell, Comandante del Huáscar, manda desde la rada del Callao un informe al Comandante General de la Escuadra Contraalmirante Galvarino Riveros para manifestar su preocupación por los defectos de los cañones de la torre, "un sistema nuevo de cañones que somos los primeros en experimentar", y propone suspender los bombardeos a fin de evitar una desgracia igual a la que ocurrió a bordo del Angamos el 11 de diciembre cuando reventó el nuevo cañón de retrocarga Armstrong, provocando 2 muertos y 13 heridos.
Estos problemas serán solucionados posteriormente, como lo manifiesta Juan José Latorre, Comandante de la División Naval después de haber recibido un informe del Comandante del Huáscar, Capitán de Navío Emilio Valverde donde señalaba que los ejercicios de cañones del 11 de mayo de 1881 habían sido satisfactorios.

El 13 de Enero de 1881

El Monitor Huáscar apoya desde el mar con su bombardeo a la Primera División del Ejército chileno al mando del Vicealmirante Patricio Lynch, en la gloriosa victoria obtenida contra las fuerzas peruanas en La Batalla de Chorrillos, a escasos kilómetros de Lima. Lo mismo hace dos días después en la batalla de Miraflores, cuando bombardea el fuerte Alfonso Ugarte, ayudando de esta manera a la división del Coronel Pedro Lagos, que prestamente respondió al ataque peruano que violó el armisticio que se había pactado entre las fuerzas beligerantes. Días después, las tropas chilenas entran victoriosas a Lima, y el Blindado Huáscar hace lo propio al Callao.

En mayo de 1888

El Huáscar integra una división naval al mando del Almirante Luís Uribe, encargada de trasladar los restos del Comandante Arturo Prat, del Teniente 2º Ignacio Serrano y del Sargento Juan de Dios Aldea. Es precisamente en la toldilla del Huáscar donde se depositan las tres urnas de quienes habían ofrendado su vida por la patria un 21 de mayo de 1879 en ese mismo buque.
El convoy naval viaja desde Iquique hasta Valparaíso, en donde se procede a depositar los restos mortales con todos los honores correspondientes en la cripta del Monumento a los Héroes de Iquique, tras una solemne ceremonia, presidida por el Presidente de la República José Manuel Balmaceda, el arzobispo de Santiago Mariano Casanova y el alto mando naval, ante el recogimiento de cientos de miles de ciudadanos que llegaron de todo el país para rendir tributo a los máximos héroes de Iquique.

1º de Abril de 1896

Arriba a Valparaíso después de minuciosas reparaciones efectuadas en Talcahuano, superando todas las pruebas de navegación y velocidad en su viaje desde el Apostadero Naval de Talcahuano. Sin embargo, una vez fondeado, después de haber sido inspeccionado por el mando naval correspondiente, una de las cañerías de sus calderas explota, causando no sólo cuantiosos daños, sino que muriendo a causa de ese lamentable accidente 14 marinos, entre ellos dos ingenieros. Siendo posteriormente enviado de regreso a Talcahuano.

En 1905

Siendo ya un buque viejo y anticuado, se hicieron estudios para remozar la nave. El objetivo era transformar el Huáscar en un cañonero moderno, para lo cual también había que extraer su tradicional torre. Se proponía iniciar los trabajos quitando el cielo, dejando al descubierto sus cañones, para poder descomponer la torre blindada de un peso aproximado de 90 toneladas.
Pero el Consejo Naval, reunido en Valparaíso en sesión del 15 de junio de ese año, acordó no aceptar el proyecto.

En 1917

Como resistiéndose a su inactividad, el Huáscar es destinado a ser Buque Ponton para las dotaciones de la flotilla de submarinos de la clase "H", que recién había adquirido la Armada de Chile.